*Al contrario, la sobreproducción exige mejorar el producto; RCD
Pedro Márquez
La saturación de palma datilera en la región noroeste no debe ser motivo de que los “hijos” sean desperdiciados al ser enterrados para impedir el crecimiento de producción, cuando ese desarrollo debe mirarse como la exigencia a competir en los mercados.
Al contrario, el productor de la fruta en el Valle Agrícola de San Luis, Ramiro Contreras Duarte, considera que el crecimiento de la superficie debe tomarse como el medio de presión para mejorar la calidad de producto.
Solamente así, con calidad el dátil sanluisino podrá sostenerse en los lugares de Europa, Estados Unidos y Canadá, a donde ya esta llegando, dice el productor local del Ejido San Luis.
Las palabras del datilero sanluisino llevan como mensaje el hacer reflexionar a las Empresas productoras de la fruta, extranjeras, principalmente asentadas en esta zona, a que no entierren los hijos al desahijar, que mejor los regalen para que la superficie crezca mas y la calidad que ya se tiene mejore.
Al obsequiar esas Empresas los hijos, la superficie de aproximadamente mil doscientas hectáreas en producción y las poco más de dos mil en total que hay en estos momentos, aumentara considerablemente cada año, asegura el productor.
Hay que recordar, dijo, que San Luis es el número uno en producción de dátil a nivel nacional y, por eso existe la obligación de seguir creciendo en superficie para no perder ese honor.
Manifestó que hasta el momento solo han sido Empresas llegadas de fuera las que están ejerciendo esa mala practica, que podría contagiar a productores locales.
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