Las recientes tormentas han dado a los arizonenses en el mercado de autos usados una razón aún mayor para prestar mucha atención a las condiciones e historial de un vehículo, especialmente en ventas privadas, ya que autos dañados por inundaciones como las ocasionadas por el huracán Florence pueden llegar a Arizona para ser vendidos.
Si un vehículo está dañado por una inundación, el título debería decir «salvage” (rescatado) o «flood damage” (daño por inundación), pero los estafadores pueden, de manera fraudulenta, eliminar el historial de inundación de los títulos de los vehículos.
«Queremos asegurarnos de que los compradores potenciales permanezcan atentos cuando ven vehículos usados y se abstengan de firmar cualquier documento hasta que el vehículo haya sido inspeccionado de la defensa», dijo Willie Hall, sargento detective de la Oficina del Inspector General del Departamento de Transporte de Arizona (ADOT), que investiga fraudes relacionados con títulos y venta de vehículos.
«Los vehículos dañados por las inundaciones que han sido reempaquetados y disfrazados son una estafa común después de eventos climáticos importantes como lo que hemos visto recientemente».
Los posibles compradores deberían inspeccionar de cerca los vehículos y estar preparados para alejarse si las cosas no huelen bien, lo que es literal en algunos casos.
Aconsejó verificar todos los rincones y recovecos del vehículo. Examinar dentro de la alfombra y tapetes, el baúl para detectar suciedad, sedimentos y moho.
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