Luego de que el presidente Trump hablara ayer desde la Casa Blanca detallando un plan para reabrir el gobierno federal a partir del 15 de febrero, mientras el Congreso discute las medidas de seguridad fronteriza, después del shutdown más largo de la historia, el representante Raúl M. Grijalva señaló que el presidente aprendió una lección importante al constatar que las rabietas, burlas en Twitter y tácticas de rehenes, no son una forma de gobernar.
“Trump presidió el cierre gubernamental más prolongado de la historia y hundió la vida de 800 mil trabajadores federales en el caos; marcó el comienzo de una destrucción sin precedentes de nuestros parques nacionales y lanzó a numerosas agencias gubernamentales a un completo desorden, todo por su monumento de mil millones de dólares a sus políticas racistas. El presidente aprendió una lección importante a través de esta debacle: las burlas de Twitter, las rabietas y las tácticas de los rehenes no son una forma de gobernar”.
Subrayó que continuará oponiéndose a cualquier esfuerzo que le dé luz verde el muro fronterizo de Trump o sus ataques a las comunidades de inmigrantes. “La verdadera seguridad en la frontera comienza con la modernización de nuestros puertos de entrada, la inversión en tecnología y la contratación de más oficiales de aduanas para garantizar una mayor actividad económica, y la fascinación delirante de Trump con un muro no hará nada para cambiar esto”.
Calificó como un grave abuso de poder el utilizar a los trabajadores federales y sus familias para extorsionar al Congreso para que apoye un muro fronterizo. “Nunca debemos recompensar a un Presidente por mantener al gobierno como rehén. Trump ha demostrado que es la verdadera amenaza para nuestra democracia, no las familias de refugiados que huyen de la violencia”, expresó por último el representante.
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