En el marco del inicio de la segunda mitad de su gobierno, el presidente Donald Trump dio a conocer, el sábado, un plan para poner fin al cierre del gobierno al anunciar el apoyo de la Casa Blanca a una iniciativa que brindaría protecciones temporales para los beneficiarios de DACA y a un estatuto de protección temporal (TPS) a cambio de 5 mil 700 millones para un muro fronterizo.
En respuesta, el representante del 3er Distrito del Congreso de Arizona, Raúl M. Grijalva señaló que el compromiso anunciado es la misma retórica de mentiras y retrocesos reciclados que se han llegado a esperar de Donald Trump. “Una vez más, usó su púlpito presidencial para caracterizar falsamente el territorio fronterizo como zona de densos crímenes y horror, al tiempo que se negó a reconocer el papel que sus políticas han desempeñado en la creación de la crisis humanitaria que vemos hoy en la frontera”.
Expuso que a lo largo de toda su presidencia, Trump ha demostrado repetidamente su incapacidad para negociar de buena fe. “Una y otra vez, ha usado a los Dreamers, receptores de TPS y familias que buscan asilo como peones en un juego enfermo para obtener su ridículo muro para su base cada vez más pequeña. Hablar sobre la reforma de nuestro sistema de inmigración se vuelve vacío cuando los republicanos del Congreso, mucho antes de que Trump asumiera el cargo, mataron repetidamente los intentos de una reforma migratoria integral. Sin embargo, esta vez, 800 mil trabajadores federales están pagando el precio de su petulancia, y Trump se niega a expresar empatía por su situación”.
Apuntó que un muro fronterizo no le dará a Trump la solución que reclama tan desesperadamente, y este acuerdo tampoco deshará el daño de su decisión de terminar con TPS y el programa DACA. Indicó que la inversión en tecnología, la modernización de los puertos de entrada y la contratación de más agentes de aduanas para facilitar una actividad económica eficiente, deben ser el centro de cualquier conversación relacionada con la seguridad fronteriza, y mantener a las familias unidas debe ser el núcleo de la reforma migratoria integral.
“Los demócratas están listos para trabajar en estos asuntos, pero solo cuando el presidente Trump vuelva a abrir el gobierno y deje de mantener la financiación gubernamental, a los trabajadores federales y a los Dreamers como rehenes para su muro de vanidad”.
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