Dimitrios Pagourtzis, el estudiante de 17 años que mató a 10 personas durante un tiroteo en su escuela secundaria en Texas admitió haber salvado a ciertos estudiantes «para que pudieran contar su historia», según reportes de las autoridades.
Pagourtzis admitió haber disparado a varias personas en la Escuela Secundaria de Santa Fe, según el investigador de la Oficina de Sheriff del condado de Galveston, identificado como J. Roy.
Roy aseguró que el joven no disparó a los estudiantes que le agradaban.
Antes de ser detenido por las autoridades locales, Pagourtizs intercambió disparos con agentes de la policía durante 15 minutos y abandonó su plan de suicidio.
«Decidió evitar eso (suicidio) y salió con las manos en alto», dijo el juez del condado de Mark Henry, en una entrevista el fin de semana.
«El investigador aseguró que había muchos casquillos de ambos lados».
El sábado, las autoridades permitieron a los estudiantes regresar al campus junto con personal de la policía para recuperar las pertenencias que dejaron al ser evacuados.
El tiroteo, aparentemente fue bien planeado por Pagourtzis en esta comunidad rural de 13 mil personas, fue el tiroteo escolar más letal desde el registrado en Parkland, cuando un joven asesinó a 17 personas.
Sin embargo, Pagourtzis no había dado indicios sobre sus planes.
El Gobernador de Texas, Greg Abbott, aseguró que el joven no dio ninguna advertencia sobre sus intenciones, a diferencia de otros casos registrados en EU.
Por su parte, los investigadores recuperaron información de la computadora y el teléfono móvil de Pagourtzis, donde habría detallado su plan, incluida su intención de suicidio posterior.
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