Apenas se reinició el año y estudiantes vuelven a hacer falsas amenazas escolares. El martes la policía de Somerton arrestó a dos adolescentes de 13 años en relación a una amenaza de tiroteo en Somerton Middle School.
El 15 de enero, alrededor de las 7:10 de la mañana, oficiales del Departamento de Policía de Somerton (SPD) recibieron información de un padre preocupado, con un hijo en Somerton Middle School, quien dio aviso de una potencial amenaza dirigida a la escuela.
El padre relató que su hijo recibió un mensaje de Snap Chat diciendo “no vengas a la escuela, tirador en la escuela”. El mensaje fue enviado a varios estudiantes en un chat grupal. SPD obtuvo una copia del mismo y los detectives comenzaron inmediatamente una investigación. Se enviaron oficiales de policía para saturar el campus de Somerton Middle School como medida de precaución.
El jefe de policía de Somerton, Joseph Turitto dio a conocer que las entrevistas con los detectives condujeron a la fuente de la amenaza publicada y se arrestó a los responsables, dos menores de 13 años, un hombre y una mujer, quienes admitieron la publicación, afirmando que era solo un engaño.
Se condujeron búsquedas en las casas y pertenencias de los dos jóvenes y no se encontraron pruebas que indicaran que éstos tuvieron acceso a armas o capacidad de llevar a cabo la amenaza. Ambos son estudiantes de Somerton Middle School y residen en Somerton.
Los detectives están seguros de que los responsables fueron arrestados. Las clases en no se interrumpieron, sin embargo varios estudiantes que participaron en el chat grupal se quedaron en casa como resultado de este incidente.
Los adolescentes responsables fueron ingresados al Centro de Detención Juvenil del Condado de Yuma por un cargo de interrupción de una institución educativa, un delito grave de clase seis.
En el transcurso de 2018 al menos cinco menores de edad fueron arrestados en el Condado de Yuma en relación con amenazas escolares.
De acuerdo a información proporcionada por el FBI, esta agencia y las fuerzas del orden público de todo el país han investigado una serie de amenazas de violencia selectiva contra escuelas y otros lugares públicos. Estas amenazas, a menudo emitidas a través de mensajes de texto o publicadas en las redes sociales, se toman muy en serio ya que no son una broma, y pueden tener consecuencias devastadoras, tanto para el público como para los perpetradores.
El FBI indicó que emitir una amenaza, incluso a través de las redes sociales, mensajes de texto o correo electrónico, es un delito federal y aquellos que las publican o envían pueden recibir hasta cinco años en una prisión federal, o enfrentar cargos estatales o locales.
Con un comentario irreflexivo en las redes sociales, los jóvenes corren el riesgo de comenzar su vida adulta en prisión y ser etiquetados para siempre como delincuentes.
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