Un niño de un año y siete meses se encuentra internado y su estado reportado como delicado, luego de que la noche del martes ingirió agua contaminada con metanfetamina.
La botella de la que bebió el pequeño, identificado como Armando, estaba en la recámara del abuelo materno.
La madre del infante fue de visita a la casa de sus padres y el menor encontró la botella y le dio unos tragos al líquido contaminado.
Fue poco después de las 10:00 de la mañana de ayer cuando el personal de la clínica 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicada en la avenida Tuxpan y la calle 44, solicitó la presencia de la Policía, pues estaban atendiendo a un niño son síntomas de intoxicación por drogas. Más información en nuestra edición impresa.
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