*Exigencias del Internacional obliga a que renuncien a el.
Pedro Márquez.-
Por las exigencias del Mercado Internacional y por la demora para recibir la liquidación, productores de dátil están volteando a ver al mercado nacional para colocar la cosecha.
Los noventa mil pesos que cuesta tener una hectárea de palma en buen estado de producción, no permite que los Intermediarios que comercializan las cosechas en el mercado internacional, tarden más de un año en pagar la producción que se les entregó, dicen datileros locales.
“Como experiencia negativa de lo inestable y adverso que ha sido comercializar en ese mercado, están los cuatro años consecutivos que todos los productores han tenido”, revelan quienes aún no pueden pagar la deuda con el buro de abogados que recupera la cartera de la desaparecida Financiera Rural.
Los Datileros que por obvias razones se mantienen en el anonimato, conjuntamente con otros compañeros de cultivo, decidieron adherirse a productores que prefieren vender su cosecha en ciudades del país.
El mecanismo que están utilizando, es entregar parte de la cosecha a un familiar, amigo o comerciante de algún punto del país, para que se las venda.
Los resultados hasta el momento han sido favorables porque no tiene tantas exigencias como en el comercio internacional.
Lo mejor de todo, coinciden los productores, es que la fruta tiene bastante demanda, sobre todo la de máxima calidad y tamaño.
Una de las principales ventajas que tiene vender localmente, es que la liquidación de lo que se entrega se hace de forma inmediata en cuanto se comercializa.
Los exponentes, consideran que a medida que el producto vaya siendo conocido en el interior del país, las ventas irán creciendo.
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