Las lluvias no solo trajeron humedad, también provocaron la muerte de un niño de 11 años de edad que sufrió una descarga eléctrica proveniente de cables mal aislados que se activaron con el agua de lluvia.
Los hechos ocurrieron cerca de las 6:00 de la tarde en el callejón 20 de Noviembre entre las calles 35 y 36, en la tortillería Acosta.
La víctima fue identificada como Kevin “N”, quien fue llevado a la Clínica 38 del IMSS, donde los médicos no pudieron sacarlo del paro cardiaco que le ocasionó la descarga.
De ese sitio lo trasladaron aún con vida a la Clínica 12, donde llegó sin signos vitales, de acuerdo a la versión del personal de la sala de emergencia.
Un tío del menor dijo a la policía que estaba en el almacén de la tortillería cuando escuchó gritos y al salir vio a su sobrino que estaba aferrado a una manguera de color negra que estaba atada a un tanque estacionario de gas fuera de servicio.
Agrego que entre él y otro hombre fueron a sacarlo del lugar, jalándole de los brazos, y fue cuando sintieron la descarga, para luego caer al suelo el menor, a quien subieron a un auto y lo llevaron a la clínica que se ubica en la calle 44 y avenida Tuxpan.
Hasta la tarde de ayer se investigaban las causas por las que la corriente eléctrica llegó a donde estaba el menor, se presume que se trata de un cable mal aterrizado o que se activó con el agua de la lluvia.
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