Por: Raúl Berumen
Cuando le preguntaron a Santos González Yescas, presidente municipal de San Luis Río Colorado, por el fallecimiento del niño en poblado Luis B. Sánchez, una muerte colateral en el enfrentamiento entre dos bandas de delincuentes, el alcalde quiso matizar y lo llamó como “un accidente”.
Santos González tuvo miedo de llamar las cosas por su nombre, buscando disfrazar la realidad.
No es la primera vez, es una constante del Ayuntamiento, muchas veces a través de perfiles falsos, el minimizar los hechos delictivos, las muertes violentas, las ejecuciones o enfrentamientos a plena luz del día. Son hechos aislados dicen, y así sumaron ya más de 500 muertes violentas “aisladas” en lo que va del gobierno de Santos González.
Pero llama la atención que la misma línea ha asumido el gobernador Alfonso Durazo, cuando sucedió el enfrentamiento que dejó 10 muertos en San Luis Río Colorado, incluido el niño en LBS, el mandatario estatal tardó seis días en pronunciarse sobre el caso.
El enfrentamiento fue un tema a nivel nacional y estatal, pero el gobernador no dedicó tiempo inmediatamente para atender la situación en San Luis Río Colorado.
Frente a los casos graves de inseguridad en Guaymas, Empalme y San Luis Río Colorado, el gobernador ha minimizado los hechos y hasta culpado a los medios de comunicación, como también lo hizo en su momento Santos González.
El gobernador sonorense se atrevió a decir que estos hechos han sido de alto impacto mediático “aunque no necesariamente representan una inseguridad para la población”.
Terrible que después de la muerte colateral de un niño, Alfonso Durazo diga que la guerra entre bandas del narco, no representan inseguridad para la población.
Es ridículo que el propio gobernador señale que los eventos violentos que se han presentado en Sonora, son producto de una reacción al incremento del estado de fuerza para inhibir, contener y desactivar las organizaciones criminales.
Pero resulta interesante que el gobernador diga que los enfrentamientos en San Luis Río Colorado se produjeron debido a que un grupo delictivo de Sonoyta fue a provocar a otro grupo del valle de Mexicali, y es que de acuerdo a los videos, era un convoy de alrededor de 50 vehículos. Entonces la pregunta sería ¿De Sonoyta a Mexicali nadie los vio pasar por SLRC? ¿Y los retenes militares en las dos carreteras que conectan a SLRC con el resto de Sonora?
*El autor es Licenciado en Ciencias de la Comunicación y director del portal de noticias VOCES.
Agrega un comentario