El poblado se encuentra sin energía eléctrica y dos tramos de carretera dañados por los arroyos de agua.
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Golfo de santa Clara
Daños de consideración dejaron, en el Golfo de Santa Clara, las lluvias producto de los remanentes del huracán “Kay”.
Pobladores del Golfo reportan daños en dos tramos de la carretera turística San Luis-Golfo, unos 5 kilómetros antes de ingresar al poblado, pasando “el columpio”.
“La carretera se destruyó por un arroyo que cruza la carretera, y otra zona casi llegando al poblado donde es imposible transitar”, dijo Gabriel Guzmán, residente del poblado.
También reportan la falta de la energía eléctrica, y calles intransitables en la zona poblada.
Protección Civil del gobierno municipal confirmó que no hay forma de llegar al poblado para la ayuda que se necesita, por lo tanto han solicitado el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional con el operativo DNIII, y advierte que el estado del tiempo complica la situación en el Golfo de Santa Clara y el poblado Luis B. Sánchez.
DAÑOS EN CULTIVOS
Importantes daños han causado en el valle de San Luis Río Colorado las lluvias derivadas del huracán Kay. Así lo consideró el conocido productor agrícola, Juan Armenta Magaña, quien señaló que las lluvias presentadas en la región podrían afectar los cultivos de algodón, alfalfa y hortalizas.
“Estamos, prácticamente, en el último riego del algodón, hay algodones ya maduros, ya el capullo está muy desarrollado, afortunadamente, la gran mayoría del cultivo todavía no está defoliado y eso lo protege un poco. Esto es algo bueno dentro de lo malo”, expresó.
Juan Armenta destacó que, mientras en otras regiones del país las lluvias representan un gran alivio, en el valle sanluisino representan serios problemas para los campesinos.
Las lluvias podrían causar una baja importante en la clasificación del producto al momento de llevarlo a los centros de acopio.
Juan Armenta consideró que el riesgo de daños a los cultivos está presente en todo el valle de San Luis, pues fue amplia la presencia de lluvias.
Será en los siguientes días cuando los productores agrícolas vayan descubriendo los daños causados en sus terrenos, derivados de las lluvias derivadas del huracán Kay, que estuvo presente en la península de la Baja California.
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