Con muchas flores, música, antojitos y la presencia de miles de sanluisinos, se vivió ayer en San Luis, el Día de Muertos, una de las fechas más importantes de la cultura mexicana.
Con cubetas, escobas, rastrillos y más, una gran cantidad de personas acudieron al panteón de la Revolución y 40 a pasar un rato junto a sus seres queridos que ya disfrutan del descanso eterno.
El operativo del Gobierno municipal dio buen resultado, pues la seguridad y el orden estuvieron presentes alrededor y al interior del camposanto.
Los dolientes llegaron al panteón y de inmediato se acercaban a los puestos de flores, escogían el ramo más bonito, y que estuviera al alcance de su bolsillo, y luego se encaminaban al interior.
Otros, después de comprar las flores se dirigían a los puestos de comida; ahí se podían encontrar deliciosos antojitos mexicanos: Desde tamales y elotes hasta churros, duritos y pozole.
Ya adentro se podía escuchar la música norteña que, seguramente había sido del agrado de alguno de los difuntos. Tumbas con flores, globos, dulces, platillos de comida, zapatos deportivos y hasta la bandera del América también se podían observar en el camposanto.
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