Los Phillies, del doctor Saúl García, se coronaron como los absolutos campeones del torneo de Primera Fuerza, organizado por la Liga urbana del beisbol local, tras vencer a los Rangel’s en una espectacular serie de playoff final, celebrada en el estadio Panchón Martínez.
Los Phillies necesitaron apenas cinco partidos para llevarse la serie diseñada a ganar cuatro de siete probables juegos de pelota.
El accionar de las dos novenas finalistas llevó a una gran cantidad de aficionados al Rey de los Deportes a las gradas del estadio Panchón Martínez, ubicado al interior del Bosque de la Ciudad.
El pasado domingo el Panchón Martínez estaba lleno, con los aficionados listos a disfrutar de las espectaculares acciones del Rey de los Deportes. Los peloteros de las dos poderosas novenas consiguieron que la emoción inundara las gradas de ese espacio deportivo local.
Martín Franco fue designado para lanzar por los Phillies. Con potentes disparos al plato maniató a los Rangel’s que lo desafiaban en la caja de bateo del estadio Panchón Martínez. Franco coleccionó una gran cantidad de argollas. Ocho en total. Solamente le rompieron el cero en el cuarto rollo, con dos anotaciones.
Los toleteros de Phillies respondieron de excelente forma al brillante trabajo de su lanzador. Alejandro Rodríguez, Jorge Núñez, Jorge Romero, Javier Carranza y Octavio Ortiz hicieron timbrar la caja registradora en la parte baja del mismo primer capítulo del quinto juego de pelota.
Los Phillies aumentaron su cosecha en la segunda entrada, con una carrera. Hicieron otra en la tercera y dos más en el quinto rollo para dejar el marcador en el definitivo 9 carreras a 2.
Los toleteros de Phillies se dieron gusto conectando la pelota hacia todos los rincones del terreno de juego para fabricar las carreras que los ponían muy arriba en la pizarra del Panchón Martínez.
Los Rangel’s se aplicaban al máximo en la caja de bateo en busca de fabricar las carreras que los mantuvieran en la pelea, pero no alcanzaban a descifrar los jeroglíficos que Martín Franco lanzaba a toda velocidad con destino final a la caja de bateo.
Los Rangel’s llegaron a su última oportunidad en la caja de bateo en una situación muy comprometida. Estaban abajo por siete carreras. Martín Franco se fajó en la lomita de los disparos.
Jorge Victoria conectó un elevado a lo profundo del jardín derecho para que cayera el primer out. Mariano Correa tomó su turno al bat, esperó el lanzamiento y conectó un elevado fácil al jardín central. Gilberto Rivera tomó su turno para enfrentar a Martín Franco y se quedó con la carabina al hombro para que cayera el último out del partido que le dio el título a los Philies, manejados por el doctor Saúl García.
Cuando cayó el último out, los peloteros de Phillies se dedicaron a festejar en grande que se habían convertido en los absolutos campeones del torneo organizado por la liga Urbana del beisbol local.
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