La capacidad de organización, los equipos, los empaques y los mercados, hacen que la agricultura que practican los horticultores del Valle de San Luis, sencillamente sea otro mundo, mucho muy diferente a la convencional.
Para que los propios europeos se hayan sorprendido del trabajo que hacen y los productos que generan los horticultores, significa que ya están clasificados como de “primer mundo”, por eso sus rábanos, sus espárragos, el cilantro, el perejil, la lechuga y demás, compiten con los de otros continentes.
Prueba de este adelanto que presentan, es que la empresa productora, empacadora y comercializadora de espárrago más grande del mundo está en México, y tiene presencia en el ejido El Fronterizo con un empaque de casi una cuadra completa de dimensión, donde empaca todo el producto de las 2 mil 500 hectáreas que tiene.
Se trata de Altar Produce, una empresa que agrupa a otras, como Misión del Bisani, Las Cumbres, 25 de Enero y Padre Kino, mediante las cuales producen otro tipo de hortalizas, no sólo el espárrago.
Pero la desconfianza por la conducta del Presidente estadounidense, Donald Tromp, está haciendo que estos empresarios de la agricultura, tomados de la mano del Gobierno dederal a través de la Sagarpa, estén buscando dónde colocar sus productos por si Estados Unidos decide acabar con el TLC.
Y la verdad les está dando resultado, porque en la Mesa de negociaciones que organizo la Sagarpa en el estado de Jalisco, exactamente en Ciudad Guzmán, los productores de berry y aguacate, lograron establecer negocios con los europeos.
Aquí en Mexicali, donde se hizo otra mesa de comercialización el viernes, se esperaba la llegada de productores de Sinaloa, Chihuahua, Sonora y Baja California Sur, a ofrecer sus productos a los rusos, alemanes, españoles, holandeses, ingleses, etcétera.
De San Luis participarían cinco empresas diferentes.
Esta opción que están dando los europeos a los productores mexicanos, debe mirarse como el lado positivo de la actitud hostil que esta mostrado el Presidente de EU a México.
Por ejemplo, la misma empresa Altar Produce, que está enviando el 17 por ciento de sus cosechas a Europa, ahora tuvo la oportunidad de aumentar ese porcentaje para disminuir el que está enviando a Estados Unidos.
Lo mismo debió haber hecho el Presidente de la SPR Río Colorado, Ing. Enrique Carrasco Gutiérrez, quien recibió a la comisión europea en los límites de sus predios de espárragos establecidos en el ejido Juárez Leyes de Reforma.
Ahí, en medio de fuertes vientos y polvaredas que hicieron el peor día de la temporada, el horticultor con buen acento inglés dijo a sus visitantes que la tierra del Desierto es virgen y que el agua es de lo mejor, lo que hace que se utilicen menos agroquímicos en la producción.
Con este de tipo de promociones del Gobierno, los horticultores deben sentirse no solo protegidos, sino también impulsados porque se les está dando la oportunidad de diversificar los mercados para no depender de uno solo, y menos de sus caprichos.
Ojalá que este esquema que se está utilizando en la horticultura, se ampliara al trigo por ser este cultivo el que más superficie destina.
En estos tiempos son solo dos empresas las que compran todo el trigo de las zonas productoras: Gradesa, que está en vías de desaparecer, y Karl Hill, la trasnacional que absorberá todo el mercado mexicano.
Si hubiera más compradores que no dependiera de Karl Hill, el precio posiblemente se mejorara para beneficiar a los productores que van a entrar el cuarto año consecutivo con el mismo precio en la tonelada, 3 mil 750 pesos.
Cierto que el Gobierno ofrece apoyo cuando el Ingreso-Objetivo es menor al que le pone el mercado internacional, pero este dinero llega a los campesinos devaluado y en ocasiones no les alcanza ni para pagar los moratorios.
Y hay pruebas de que sí se puede pagar mejor la tonelada, como lo hacen los compradores que aparecen al inicio de cada cosecha, y que por cierto ya se están mirando actualmente, ofreciendo 4 mil 300 sin exigir nada al productor, como pureza, nutrientes, etc.
Si estos compradores lo hacen, significa que si se puede, y que solo falta que eso se reglamente.
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