Plantas Tratadoras

La demanda del servicio de drenaje que están solicitando los residentes del poblado del ejido Independencia, no es privativo d ellos, todos los asentamientos están deseando lo mismo desde hace años.

Este deseo, se verá incrementado ahora que el Ayuntamiento ha decidido dotar del elemental servicio a los residentes del Poblado del Ejido Islita, obra que se hará en reciprocidad por las cuatro hectáreas que le cedió para un panteón municipal.

Pero así como le hace falta el drenaje a la Islita, también lo necesitan en Lagunitas, Independencia y Estación Riíto, comunidad ésta que el manto acuífero está solo a unos metros de profundidad y donde el peligro de contaminación es mayor que en las otras comunidades.

Como es difícil llevar el servicio a todos los poblados y considerando que el agua cada día escasea más, los Ingenieros civiles –algunos-, ven como alternativa de solución, la instalación en esas comunidades de plantas tratadoras de aguas residuales, la que podría comercializarse con los agricultores para recuperar la inversión.

Vendiendo el agua que se recupere al sector primario, los residentes de esos lugares dejarían de contaminar el suelo y las aguas subterráneas, como también ya no pagarían por los constantes desagües que practican a las fosas.

Para que los productores agrícolas se interesen en esas aguas tratadas, se les tendría que vender a precios accesibles, no como se pretendió hacerlo con las de la planta tratadora que por muchos años se estuvo desperdiciando a cielo abierto, precisamente porque no pudieron venderla.

El agua que se logre del drenaje de la Islita, se dice que tendrá como destino las mismas de la Plana Tratadora, es decir, los humedales artificiales que proyecta el Ayuntamiento a través de su para municipal, el OOMAPAS.

Ojalá que este proyecto a la vuela de dos o tres años no quede en el olvido como se hizo con el Bosque la Tortuga, que al final de cuenta solo sirvió para albergar oficinas, vendedores y a los que gustan caminar por las mañanas y tardes.

El proyecto original que contemplaba hasta lagunas se perdió. Solo basura se puede ver en el amplio espacio.

Pero volviendo al tema, hay cultivos, sobre todo los de tipo forraje, en donde sí se puede utilizar esa agua de la planta tratadora, más no en los clasificados en la cadena alimenticia, como el trigo y el maíz, que son los que se trabajan en esta zona.

Lo cierto es que si se analiza el problema del agua con un punto de vista responsable, sí valdría la pena que Organismos como los OOMAPAS y la misma Comisión Nacional del Agua –CONAGUA-, consideraran esas plantas en los poblados para rescatar el mayor número de metros cúbicos del elemento.

Ya se miró en Mexicali el problema que se genero con la instalación de la Cervecera Constellation Brands, precisamente porque ya hay carencia efectiva del líquido, y también ya estamos mirando los sanluisinos que al acuífero local las autoridades de la CONAGUA y los mismos políticos, lo están considerando como el que puede surtir del elemento a todo el noroeste.

Esto es un peligro no a futuro, sino de ya, porque es ahora cuando las concesiones se están vendiendo como si fueran naranjas, sin ninguna consideración de lo que se vivirá en tres o cuatro años.

Por el problema que es inmediato, toca a los actuales funcionarios de todos los niveles, como a los líderes agrarios, defender el acuífero mediante la prohibición de extender nuevas concesiones.

Por ello, el OOMAPAS no debe seguir actuando con sentido recaudatorio al aumentar el número de metros cúbicos a los usuarios de cuota fija.

Sin ninguna responsabilidad, solo por captar más dinero, la Dependencia Municipal aumento la cuota de consumo invitando a los usuarios a gastar más agua, porque “de todas maneras me la están cobrando”.

Esto contrasta con el mensaje que envió a través del foro del agua que organizo recientemente, y donde el expositor Martín Salgado advirtió del peligro que ya se puede percibir por no cuidar  los mantos.

Sobre todo, porque el acuífero ya está en número rojos.