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Incapaces
EL CABILDERO
El pasado fin de semana se cumplieron seis meses de que anunciaron la muerte del primer mexicano a causa del covid-19.
Luego murió otro, después uno más, y otro, y otro, hasta llegar a la terrible cantidad de 73 mil 493 mexicanos que han perdido la vida a causa de esta terrible enfermedad.
El gobierno mexicano ha sido incapaz de contener esta enfermedad y se ha dedicado a atender a los que se infectan, sin hacer una búsqueda intensiva de los contactos de los infectados, ni nada por el estilo.
Pruebas
La misma Organización Mundial de la Salud destacó la necesidad de trabajar en la contención de la enfermedad y no limitarse a la labor de mitigación.
La OMS lo dijo bien claro: pruebas, pruebas, pruebas, sin embargo, la incapacidad que han mostrado los que se encargan de lugar contra la pandemia ha dejado claro que no seguirán ese camino.
Y, es que, mientras otros países se dedican a hacer pruebas a diestra y siniestra, que les permiten identificar los brotes y actuar en consecuencia.
En México solamente les hace pruebas de detección a los que llegan al hospital con claros signos de la enfermedad.
Se olvidan de evaluar a esposos, hijos, familiares, vecinos, amigos y más, y, pues, de esa forma, nunca se va a parar la enfermedad.
Los que llegan
EL CABILDERO
De esta forma, el gobierno mexicano se ha limitado a atender a los que llegan a los hospitales, algunos de ellos, lamentablemente, solo se acercan a morir, ni siquiera alcanzan a pasar al área de cuidados intensivos.
Así está la situación con la atención que el gobierno mexicano le ha dado a los pacientes de covid, para luego gritar a los cuatro vientos que los hospitales tienen camas disponibles.
Se acaban las actas
Lo que no dice el gobierno mexicano es que las actas de defunción se acabaron por exceso de demanda, lo que deja ver la lamentable forma en que el gobierno ha enfrentado a la crisis de salud.
Burla mundial
EL CABILDERO
Organizaciones nacionales y mundiales han puesto en evidencia la fea forma en que la pandemia ha hecho garras al sector salud en nuestro país y, ni eso ha sido suficiente para que el grupo en el poder haga un alto en el camino y corrija el rumbo.
Hasta la revista más importante del mundo científico señaló lo inútil que se ha visto Hugo López-Gattell al frente del combate al coronavirus en México.
Y, pa’cabarla, nuestro presidente se ha hecho merecedor al anti Premio Nobel en la categoría de Educación Médica, el Premio Ig, que se otorga cada año a quienes hacen “investigaciones ridículas e irrelevantes en el mundo”.
Según fue expresado en la ceremonia de entrega, López Obrador se hizo merecedor al reconocimiento “por ignorar la experiencia de los científicos, instituyendo políticas desastrosas para hacer frente a una pandemia mundial” de Covid-19
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