A 43 meses del caso Iguala, familiares de los estudiantes desaparecidos, normalistas de Ayotzinapa y activistas marcharon ayer del Ángel de la Independencia al Zócalo capitalino.
«¡Porque vivos se los llevaron, vivos los querremos!», corearon los inconformes que portaban bordados con el nombre de los estudiantes.
Felipe de la Cruz, vocero de los tutores, criticó que a tres años y meses se revelara que capos del crimen organizado idearon desde Estados Unidos el ataque contra los normalistas.
Sostuvo que a meses que deje su cargo, el Presidente Enrique Peña Nieto pretende cerrar el caso y dejar que los responsables intelectuales y materiales vivan en la impunidad.
Enfatizó que aprovechando el proceso electoral, el Gobierno federal no enfrenta el problema.
Expuso que hasta hoy suman 43 meses de» oídos sordos y de indigencia» por parte del Ejecutivo federal, quien no les ha presentado pruebas científicas sobre el crimen de los jóvenes.
Por la manifestación, la policía capitalina cerró un carril central de Avenida Paseo de la Reforma, desde la Glorieta del Ángel de la Independencia a la Glorieta de la Palma.
Las víctimas demandan que en la indagatoria del caso se incluyan cuatro líneas de investigación, entre ellas que el móvil del crimen está ligado al trasiego de drogas de Iguala a Chicago, Estados Unidos.
La segunda es que se investigue al Ejército por los hechos violentos del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero; la tercera que se indague a policías municipales de Huitzuco y la cuarta que se analicen más de mil teléfonos celulares.
Agrega un comentario