LA COLA TAMBIÉN ES PERRO

Es cierto, “la cola también es perro”, pero hay pulgas con las que un político no debería lidiar si no quiere salir todo ‘picoteado’.

Igual que cualquier otro ciudadano, el doctor Manuel Baldenebro tiene todo el derecho a aspirar a algún cargo de elección popular, sin embargo, cuando las condiciones y/o circunstancias nada más no ‘cuadran’, quizás más valdría considerar.

Y le digo el porqué:

Ir con Morena (López Obrador) a una contienda electoral cuando has tenido el ‘visto bueno’ de Manlio Fabio Beltrones, tanto para lograr posiciones al interior del PRI como para llegar a la dirigencia sindical del Seguro Social en Baja California y San Luis, no es precisamente una señal de agradecimiento de su parte –recordar que el Partido del médico, el PES, va en alianza con Morena y el PT.

Usted lo sabe, siendo aun militante del Tricolor, el Balde tuvo el respaldo del ex Gobernador de Sonora para lograr la candidatura a la Diputación federal por el Distrito 1.

Y más recientemente, el ahora dirigente del Partido Encuentro Social (PES) consiguió llegar a la Secretaría General de la Sección VII del Sindicato Nacional de Trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social con el ‘puchoncito’ del también ex legislador y ex líder nacional del PRI, quien sólo tuvo que tomar el teléfono y pedirle el favor a su sobrino, el Delegado Regional del IMSS, Francisco Iván Beltrones Burgos.

Así que, a no ser que sea una “estrategia rara” (como aquella que se aventó cuando siendo candidato a Gobernador por el PES, declinó a favor de Claudia Pavlovich Arellano), no le encuentro ningún sentido a darle de patadas al pesebre.

Y es que si fuera solo a la elección, quizás no hubiera tanto lío, pero ir con AMLO, el archi-recontra-enemigo del PRI y José Antonio Meade, caramba, como que las cosas nomás no ‘cuadran’.

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A propósito de Andrés Manuel López Obrador, la declaración que soltó este viernes ante un grupo de banqueros del país bien vale la pena tomarla como una advertencia a tiempo.

«El que suelte el tigre, que lo amarre, ya no voy a estar yo deteniendo a la gente luego de un fraude electoral, así de claro», es lo que advirtió al aludir la posibilidad de ‘triquiñuelas’ en los comicios del 1 de julio y un eventual estallido social.

En lo personal, no creo que en el país estén dadas las condiciones para un levantamiento como el que vaticina AMLO, aún y cuando pudiera haber “inconsistencias” en el proceso, pero de cualquier modo, señores, no está de más tener presente ese posible escenario.