Afecta cultivos establecidos porque no pueden regarse
Pedro Márquez
Sin saber a qué se debe, Antonio Toledo Ramírez, hace público la aparición de un extenso socavón que se formo en su parcela del ejido Lagunitas, y que ha afectado gravemente el cultivo de la alfalfa que tiene establecida, porque no pudo regar.
El ejidatario asegura que es la segunda ocasión que el fenómeno se presenta, agrega que, sin tener el conocimiento, considera que las extracciones de agua que se están haciendo en el desierto, podrían ser la causa.
A diferencia de la primera ocasión que fueron 54 socavones los que se presentaron, ahora solo fueron unos cuantos, pero uno de ellos tuvo una longitud de aproximadamente cincuenta metros, y de cuatro a ocho de ancho en algunos puntos.
La profundidad es grande, porque todo el volumen de tierra se pierde, como también el agua del cultivo.
Lo cierto, dijo, es que estas hoquedades que aparecen de oeste a este han causado graves problemas, “porque si la primera vez el módulo de riego al que pertenezco, el tres, me ayudó con el acarreo de tierra para taparlo, en esta ocasión, no se han manifestado a pesar de que el problema ya tiene dos meses”, dijo.
“De acuerdo a mi capacidad económica y de equipo, he realizado trabajos de nivelación de la parcela, pero si se requiere de ayuda”, acepta el expresidente del comisariado de su ejido.
Dice que el acarreo de la tierra para nivelar perfectamente el área afectada, sería de una distancia oscilante entre los cien y los ciento cincuenta metros.
Las pérdidas ocasionadas por el fenómeno, son totales, al menos en una hectárea, porque los riegos en la alfalfa ya no se pudieron hacer en los últimos meses.
De lo que sí esta seguro el productor, es que el problema es serio porque ahora tendrá que regar con extremo cuidado, sobre todo por las noches por el peligro que representan estos sorpresivos hoyos que atrapan también a serpientes.
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